La antigua prisión de San Agustín, construida en 1891 por Henry Flagler, tuvo en su interior a prisioneros cautivos durante más de 60 años. Este edificio, que parece más un hotel que una prisión, fue restaurada, sin embargo todavía hoy en día conserva el ambiente de la época.
Participará en una visita guiada por este lugar intrigante que conserva numerosos secretos. Conocerá también la historia de la antigua prisión y de cómo los prisioneros vivían en el lugar. Durante su visita guiada, se encontrará con el Sheriff Joe Perry, uno de los guardias de prisión más estrictos del sur de Estados Unidos. Los actores en traje de época lo divertirán y le darán un ambiente único al lugar.
No se pierda la ocasión de visitar la prisión de San Agustín, una de las prisiones más extrañas que aún se conservan hoy en día.